La atención fue muy buena por parte del anfitrión.
La ubicación es increible, las fotografias no le hacen justicia, nos quedamos enamorados del lugar. Habia otra casa justo debajo y ni si quiera se escuchaba nada, tiene privacidad entre casas.
Fuimos 6 amigos y 3 perros. La única pega que podria tener, es que el exterior no está vallado del todo, con lo cual, una de las perras que venian con nosotros, (un tanto escapista) se iba, entonces tuvimos que poner sillas y muebles de exterior para tapar las salidas.
Por lo demás, repetiremos seguro, ha sido un placer!